Tres orejas en la primera de abono de la Feria del Sol
Buena entrada y clima agradable registró la tarde de la primera corrida de abono del Carnaval Taurino de América 2011. La luminosidad y el calor del astro rey retornaron a Mérida, en cuyo coso monumental también se hizo presente el calor de la afición, la alegría de la Fiesta Brava y la belleza de la mujer merideña. Antes del inicio de la misma fue coronada la Srta. Karina Escalante como Reina Taurina.
Más de tres cuartos de plaza fue el aforo registrado en la tarde del viernes 4 de marzo; tarde en la que el matador de toros español Miguel Ángel Perera, originalmente anunciado para la corrida, fue sustituido por Manuel Díaz “El Cordobés”, ovacionado por el público asistente en su salida al paseíllo, acompañado por el máximo exponente de la torería nacional Leonardo Benítez y el coleta granadino David Fandila “El Fandi”.
Los toros, tres de ellos pertenecientes a la ganadería “Rancho Grande” (1º, 4º y 5º) y tres a “El Prado” (2º, 3º y 6º), delimitaron perfectamente dos ecuadores, el primero mejor que el segundo; mostraron en su mayoría correcta presencia, diverso comportamiento y juego. Sin embargo, en lo atinente a las astas, fue notoria la estación de los mismos en una “barbería”. Con la denominación de los tres primeros ejemplares se rindió homenaje a la memoria del extinto escultor y gran aficionado taurino D. Manuel de La Fuente.
Leonardo Benítez abrió el festejo con “Delafuente”, bonito berrendo en negro de “Rancho Grande”, bizco del pitón izquierdo, al que banderilleó con maestría. Ejecutó una faena larga y por ambos pitones dadas las bondades del astado, quien fue noble, bravo, y siempre estuvo atento al diestro caraqueño. Tras una estocada limpia en ejecución, aunque trasera y tendida, fue premiado con las dos orejas. Benítez no corrió con la misma suerte en el segundo de su lote, cuarto de la tarde y más chico de la corrida, pues falto de fuerzas se fue al suelo varias veces impidiendo el remate de los pases. La premura en la suerte suprema retrasó su finiquito. Palmas.
Leonardo Benítez paseando las dos orejas logradas. (Foto: G. Cegarra)
Manuel Díaz “El Cordobés” pechó con el lote más complicado. Ambos resultaron sosos, distraídos, con la cara alta, y en la muleta sin recorrido ni fijeza. Ninguno se dejó, y si bien es cierto que se ausentó la materia prima, no así estuvo ausente la voluntad en el diestro madrileño. ¡Voluntad!, y nada más.
David Fandila “El Fandi” supo acrecentar las condiciones de “Gaditano”, lidiado en tercer lugar y tatuado con el hierro de “El Prado”, pues a su salida fue bastante abanto. Derribó los caballos en la pica, mientras que en el segundo tercio los avivadores cumplieron con su función denominadora luego de haber colocado con excelencia tres pares de rehiletes. De su labor muleteril destacaron una serie de derechazos de rodillas, molinetes de rodillas y demás pases con ligazón. No obstante, “Gaditano” se fue apagando paulatinamente. Culminó con un espadazo entero, caído y tendido. Los errores del cachetero enfriaron el ambiente y sólo recibió una oreja. En el último, segundo del lote, se enfrentó a un toro bien armado, castaño y con aparentes defectos visuales. Nuevamente puso en pie al público con las banderillas, y con la muleta le fue embarcando poco a poco hasta someterlo y templarle de manera ortodoxa, pues no es menos cierto que su toreo se caracteriza por ser “despegado”. Luego de fallar con el acero se despidió en medio de las palmas.
Culminó la primera corrida de abono de la XLII Feria Internacional del Sol con un saldo de tres orejas en total: dos cercenadas por Benítez y una por El Fandi. El torero de La Vega, Leonardo Benítez, se alzó como triunfador de la misma.
XLII Feria Internacional del Sol.
Viernes 04 de marzo.
Plaza de Toros Monumental “Román Eduardo Sandia” de Mérida.
Primera corrida de abono.
Seis toros de “Rancho Grande” y “El Prado”, bien presentados en su mayoría (salvo el 4º), de distinto comportamiento y juego desigual. El 1º bravo y noble.
Leonardo Benítez: dos orejas y palmas.
Leonardo Benítez: dos orejas y palmas.
Manuel Díaz “El Cordobés”: palmas y silencio.
David Fandila “El Fandi”: una oreja y palmas.
Presidente del festejo: Dr. Jorge Bustamante Calderón.
Entrada: más de 3/4 de plaza.
- Evidente exceso de personas en el callejón que paseaban e interrumpían la labor de las cuadrillas, echando por la borda las promesas de saneamiento contra estorbos. Mucho ruido y pocas nueces…
- Ademanes de olas en los tendidos generales que acertadamente no fueron adoptados por el resto de los asistentes.
- El célebre pintor taurino José López “Canito” plasmó desde el callejón en sendos dibujos su óptica ilustrativa sobre los dos momentos más importantes de la tarde
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